Mal recuerdo: Un día como hoy, pero hace 10 años, Rangers cayó a la Primera B
La vergüenza que ningún hincha quiere ser parte se vivió en el estadio Fiscal de Talca un 19 de abril de 2014, firmando un descenso cantado de hace varias fechas.
El equipo que dirigía Jorge Garcés, perdió de local ante Audax Italiano, dos equipos que estaban necesitados de puntos, donde el cuadro itálico se alzó con la victoria con un claro 2-0.
Por su parte, el cuadro piducano se hundió más en la tabla y perdió la categoría. Sus hinchas lamentaron vivir esa crónica de una muerte anunciada.
En lo futbolístico, el cuadro dirigido hace 3 fechas por el «Peineta», quien señaló que Rangers era «su primer amor» estaba obligado a ganar, pero a los 61 minutos, Bryan Carrasco abrió la cuenta para la visita, mientras Rangers no encontraba las ideas para plantearse en el campo, lo que ocurrió casi todo el año, especialmente con el anterior DT.
El partido fue una agonía para los hinchas rojinegros, que esperaban solo un milagro en la cancha.
Esto no ocurrió y en el epílogo anotó Felipe Mora, de penal, sellando el 2-0.
Por si fuera poco, Francisco Tapia y Jorge Valenzuela se fueron expulsados en el cuadro rojinegro.
Lo cierto es que el descenso de Rangers fue el resultado de no una, sino varias campañas nefastas, pese a que solo un par de torneos antes llegó hasta semifinales, cayendo con Huachipato en un partido que el portero Nery Veloso nunca más jugaría.
La gestión de los hermanos Pini al mando del club no fue aplaudida por los hinchas Talca, ya que la sociedad anónima se mantuvo siempre distante a la identidad talquina, todo en medio de investigaciones judiciales por triangulaciones en el negocio del fútbol que era una novedad en esos tiempos.
Incluso la planilla de Rangers tenía nombres de extranjeros que poco y nada aportaron en la cancha, incluso algunos fichajes que nunca pisaron Talca.
De vuelta en la pelotita, la campaña comenzó con Dalcio Giovagnoli y luego Fernando Gamboa en la banca, un técnico argentino sin trayectoria cuya permanencia se alargó más de lo necesario y con el equipo en zona de descenso.
Nunca despegó, pero tuvo una leve alza al mando del talquino Garcés.
Ese año fue la debacle, incluso recordando haber entregado la galería a los visitantes O’Higgins y Universidad Católica en algún momento y con valores de las entradas lejos de la realidad del pueblo local.
Desde 2014, las administraciones han sido más de lo mismo, manteniendo al club vegetando en una división donde nunca había pasado tiempo.
Ya son justo 10 años de este sufrimiento, del noveno descenso de Rangers (1976, 1978, 1987, 1989, 1994, 1999, 2006, 2009, 2013-2014).
Sin embargo, este año se huele algo distinto. Hay un tufillo a gloria y aunque Rangers no tenga el «juego bonito» como estandarte, los resultados generan expectativa en un pueblo que está dolido, pero que siempre mantiene la fe…
