Historias Rojinegras: Manuel “Selim” Chat Muñoz, su vida y anécdota junto a Rangers

Manuel “Selim” Chat Muñoz, más conocido en la memoria histórica de nuestra ciudad como Don Selim.  Hijo de inmigrante sirio, nació en San Clemente, pero siendo muy pequeño aún, desde los 2 años, se afincó en Talca con sus padres y hermanos para no moverse más de la capital del Piduco. 

Selim es un nombre predominantemente masculino de origen árabe, que significa “seguro, de buena salud”, aunque otros autores le dan la interpretación de “pacificador”.  Como buen exponente de su sangre dedicó su vida al comercio llegando a ser el mentor y propietario de la emblemática Fabrica de Helados El Rey, ubicada en la 1 sur de nuestra ciudad, frente al Banco del Estado espacio siempre abierto para la franca conversación de los amigos.

Sus inicios en Rangers fueron de activa participación en la Barra de Rangers, su hermano Alfredo era dirigente de la institución rojinegra, desde allí empezó a formar su liderazgo que al cabo de los años lo llevaría a ser presidente de Rangers, justamente a finales de la gran crisis deportiva y económica que llevó al cuadro del Piduco a descender a la segunda división el fatídico año 1976. 

Este duro golpe luego de 23 años ininterrumpido en primera división, significó repensar la institución que ya por varios años vivía zozobras e inestabilidad, también es necesario poner en el contexto del tiempo los factores que se debieron conjugar para dar salida a tan dolorosa crisis institucional, fracasos directivos en un país y una ciudad que vivía en el marco de una Dictadura cívico militar en donde las organizaciones de la sociedad estaban sometidas a estrecho control de la autoridad. 

Así fue como Don Selim es elegido presidente de Rangers y desde su liderazgo afincado firmemente en la hinchada, en los socios que ya por años tenían la compañía de este “turco” de gutural voz gastada, animaba y aglutinaba adeptos para los colores de Rangers de Talca. Un hombre como don Selim, hombre del comercio, pero de una empatía, carisma y cariño por Rangers y sus adeptos, supo ponerse a la cabeza de un proyecto que tenía por objetivo esencial el retorno al futbol grande, lo que consiguió con creces con el vice campeonato obtenido luego de la final de 1977 con Coquimbo Unido que relatamos la semana pasada.

Pero para hablar o recordar a Don Selim,  no pueden quedar en el tintero sabrosas anécdotas  que dan cuenta de su carácter y cercanía con los talquinos y talquinas, una de las más conocidas para muchos en la memoria colectiva de nuestra ciudad es ese encuentro a  fines de 1968, en Fiscal de Talca, se cuenta una de sus mejores anécdotas, cuando se armó una gresca impresionante frente a la tribuna del fiscal, producto de un faul descalificador contra Guillermo Medina (que bien sabemos se las buscaba) y fue a parar a la pista de cenizas de la época luego de un patadon de un defensor albo, que fue encarado rudamente por los jugadores Ranguerinos, llegando hasta la trifulca a grandes zancadas el corpulento arquero colocolino Efraín Santander que repartió golpes, tacles y patadas volantes a quien se le cruzó en el camino.

Ese hecho significó que don Selim, no pudiera controlar sus ímpetus e ingreso al campo de juego y encaró a Santander, como comprenderán el resultado no podía ser otro que las costillas rotas de Don Selim y sacado del campo por las fuerzas policiales. En Wikipedia se lee en la trayectoria de Efraín Santander: “A fines de 1968, en el Estadio Fiscal de Talca, se cuenta una de sus mejores anécdotas, ya que su temperamento lo traicionó, sacando a relucir su cinturón negro golpeando incluso hasta el jefe de la barra de Rangers de Talca. Se libró de media docena de Carabineros y siguió golpeando gente. Santander, que según todos, actuó en defensa propia, pasó esa noche detenido y fue liberado al día siguiente, previo pago de una fianza de cien escudos”.

Por su parte, don Selim, años después en una entrevista recordaba este hecho y relataba: “Eso fue aquí en Talca. Jugaba Rangers contra Colo Colo, salté la reja para pelear con un hombre que no me correspondía en peso ni en edad, el arquero Santander de Colo Colo. Un año después todavía seguía el juicio en mi contra. Nunca me olvidaré lo que me preguntó la jueza que seguía la causa. Ella me dijo: ¿Cómo se atrevió a pelear con ese tremendo hombre?  Y yo le respondí:…”es que de la tribuna se veía muy chico. A la hora que se lo grande que es no entro ni amarrado”

Para el recuerdo quedan también esas emocionantes jornadas en que don Selim promovía acompañar a Rangers, en trenes especiales a Cauquenes, Curicó y Linares, viajes que se llenaban de mística y nuestros vecinos veían verdaderas invasiones a sus campos deportivos, lo que daban un marco impresionante de vítores, canticos y colorido a los encuentros deportivos de esa gran campaña del retorno. Aun también en la memoria el inconfundible relato radial de “EN EL ESTADIO NOS ENCONTRAMOS”.

Quiero expresar al término de este espacio, un saludo cordial y fraterno a su hijo José Selim Chat Aldúnez, con quien compartí varios años en el Directorio de Rangers, un hombre leal y tan Ranguerino como su padre, un abrazo “Chilo” para ti familia, mis agradecimientos por compartir conmigo historias y fotografías de tu padre. Recibe un gran abrazo rojinegro.

Años más tarde, le preguntaron para un aniversario.

¿Por qué ama tanto a Rangers? “Porque es como amar a la patria. Pese a que mi padre era Sirio, yo me identifico con mi tierra y lo primero es Rangers, después lo demás”.

HASTA LA PROXIMA SEMANA.

Por Carlos Soto Gutiérrez.