GOLDEN STATE WARRIORS SE ACERCA A LA CORONA

No hay explicación para lo que hizo Irving en el último suspiro del partido que los Clevelans Cavaliers terminaron cediendo por 113 a 118 ante Golden State Warriors.
Tenía la pelota, mientras sus compañeros esperaban con expectación y confianza que hiciera algo magistral para liquidar el partido.
Sin embargo, optó por enfrentar la defensa hacia la pintura e increíblemente se la pincharon.
Vino el contragolpe y el alero Kevin Durant se mandó un triple que sentenció este tercer partido de finales de NBA, dejando al retador 3 a 0 arriba y al borde de coronarse campeones cuando se encuentren nuevamente este viernes.
Quedaban 45 segundos y el notable refuerzo que llegó desde Oklahoma y quien aportó 31 puntos al global, virtualmente cercenó las aspiraciones de los Cavaliers de descontar la serie cuando más lo necesitaban.
Es que Kevin Durant, quien confesó más adelante que por años ha practicado el mismo tiro, tuvo tiempo para estabilizarse frente al tablero y lanzar con gran comodidad para cambiar la historia de un partido que les parecía perdido.
De paso, Golden State Warriors llegó a un 15 a 0 en un Campeonato NBA y está a una victoria para lograr un récord nunca antes visto.
En el último intento, LeBron James (39 puntos) fue al costado a intentar una posesión de 3, pero lo bloqueó Iguodala y todo se esfumó para los campeones vigentes.
Es que el mérito que tuvieron los Warriors fue remontar seis puntos y quedarse con un triunfo que los deja al borde del éxito en el torneo de básquetbol más espectacular que se juega en el planeta.
El base Stephen Curry se cuadró con 26 puntos, cinco triples, capturó 13 rebotes, cedió 6 asistencias, recuperó 1 pelota y elevó a su equipo a una performance que rozó en la perfección “ha sido la victoria más importante y que necesitábamos para mantener el camino ganador”, comentó a la cadena a ESPN.
Mientras sucedía esto, afuera del recinto y en pantallas gigantes, los seguidores de los Cavaliers enmudecían dramáticamente observando un epílogo impensado en todo sentido.
En 2016, Golden State Warriors estaba 3 a 1 arriba, pero en una remontada sin precedentes, Clevelans se colocó 4 a 3 y se proclamó campeón de NBA.
Pareciera que la realidad actual, es distinta.