
Ricardo Pini y una puja muy particular: “Hacer las cosas bien, es un buen negocio”
Fútbol Neto es un podcast que se ejecuta al otro lado de la cordillera, donde en unos de sus programas fue invitado el ex propietario de Rangers, Ricardo Pini, quien ahora es el mandamás de Unión La Calera.
La temática del programa radica en la gestión e innovación el fútbol moderno, por lo que hablar con el abogado trasandino calzaba perfecto para una de las tantas grabaciones a cargo de Jorge Baravalle.
El tema para arrancar la conversación fue el cómo se llega a comprar un club, en referencia a la adjudicación de la propiedad de Rangers.
“Siempre tuvimos la inquietud en la familia de volcarnos a la gestión deportiva. En el asesoramiento a un cliente en particular investigamos dónde comprar sociedades anónimas y estudiamos comprar un club de fútbol… Es distinto asesorar que comprar con dinero propio e invertir a riego personal en el patrimonio de un club, se complejiza, pero decidimos con mi padre y hermano invertir en Rangers el 2010, remate que había fracasado en dos ocasiones. Pujamos por un precio en un remate bien particular”, señaló.
Y claro, pasa que del remate además casi quedan fuera, pero se les abrió la puerta servilmente de la sala para que fueran parte de la puja a última hora: “Ganamos el club, empezamos con el título que éramos propietarios y tres meses después empezaba una competencia y había que definir técnico, jugadores, plantel oficial… a la postre fue bueno, pero en ese momento fue muy riesgoso”.
Sin embargo, ha más recuerdos del día de la puja: “Llegamos a Talca a las 7.30 horas y luego a la sala del remate. Llegamos dos argentinos, abogados, de traje y corbata para participar donde había un grupo de empresarios locales y otro encabezado por el alcalde. Ellos se iban a disputar el club, pero se dieron vuelta cuando nos vieron ingresar a la sala, porque no había signos de un extranjero que iba a pujar. La base eran 325 millones de pesos y terminamos adjudicándolo en 550 millones de pesos en ese entonces”.
El podcast pasó por varios tópicos luego, tratando el trasfondo de gestionar instituciones e incluso el mito urbano de que “Ricky” fue un buen jugador de fútbol.
“Siempre vi cómo gestionar en la industria del fútbol. Me pasa que jugué siempre fútbol amateur y siempre fue una cosa frustrada en mí no haber jugado profesional y mi familia me impulsó a seguir en la abogacía. Me quedó eso, de vincularme de alguna manera al futbol, uno vive como juega, en un picado conoces a la gente… Uno de afuera lo ve más fácil. Desde la gestión nos pareció lo mismo respecto a le gestión. Fue un cúmulo de cosas, incluido el aburrimiento de la profesión de abogado, asistir al tribunal y pensamos en un cambio”, dijo Pini.
Se le consultó además por qué compraron el club: “Hay mucho de amor por el juego y la actividad, por lo que significa gestionar una institución y algo de locura, porque no sabíamos a lo que nos enfrentábamos. Hay un grado de incertidumbre en esta actividad que debes asumir. Por qué Chile, hicimos el análisis en distintas partes del mundo desde el 2010, en Latinoamérica y elegimos Chile, porque los clubes vinculados a la Conmebol tendrían mayor participación y sentimos que era Chile el marco jurídico que daba la seguridad para un proyecto y buscamos a un club que pagara los egresos de un proyecto serio, con ingresos que permitieran sostener un aspecto competitivo, con infraestructura. Y el precio era razonable y se podía dar ese acceso”.
Sobre el futuro y el aspecto formativo de los clubes respecto a la renovación, Pini la tiene clara: “Todavía Chile está en la búsqueda de un proyecto claro que se sostenga en el tiempo y que le permita a los clubes invertir para la proyección. La norma de hace 7 años de sumar minutos Sub-21 no ha rendido éxito para una columna vertebral de los equipos. Se usan como extremos a laterales, donde menos daño pueden hacer. La norma es compleja si no se da por el mérito deportivo. No hay competencia de los chicos que saben que deben jugar para cumplir… Nivela para abajo”.
Sobre la manera de trabajar la gestión deportiva, Pini añadió que “los cambios han sido significativos en los premios y en la apertura para mayor participación de los clubes en torneos internacionales de la Conmebol y apuntamos a eso nuestro proyecto deportivo. Por una parte, una base local y otros jugadores que vengan a consolidar al club en asegurar participación en copas. Ese es el proyecto de Calera, consolidarse en la zona de copas y ser competitivo”.
“En Rangers fue una gestión más intuitiva, porque ascendimos, pero sentimos que se podía estratégicamente hacer mejor. El club debe tener ciertas identidades definidas, para tener coherencia con la dirección técnica. Una cuestión para analizar perfiles”, añadió.
¿Ganaron dinero en Rangers?
“Sí claro, ganamos dinero y valorizamos el club. Ahora tienen predio que no tenía, donde sigue desarrollando la actividad. Es lo que hacemos en los clubes que hemos estado, reinvirtiendo dinero en los proyectos… Rangers lo vendimos en 2 millones 200 mil, aparte de las tierras y otras cosas. A Calera lo compramos en 2016 en un millón 240 mil dólares, lo que vale hoy 7 millones de dólares”.
Ricardo Pini complementó: “Hacer las cosas bien, es un buen negocio. Hay que trabajar con excelencia. El modelo de la sociedad anónima no calza en Argentina, porque el hincha debe ser representado. Los clubes no deben perder su identidad, pero todo con responsabilidad”.
Finalmente, Pini no descartó invertir en nuevos clubes en Chile, Argentina y otras latitudes.